Consejos para cuidar la mandíbula
Aunque los pinos son muy poco exigentes y fáciles de cuidar para los árboles, su crecimiento se beneficiará si dedicas un poco de tiempo y cuidados a tu conífera. Con las puntas adecuadas, su pino se convertirá en un árbol magnífico. Alternativamente, también puede mantener el pino como bonsái. Puedes leer aquí lo que tienes que tener en cuenta con los diferentes tipos de cultivo.
Un pino necesita poco mantenimiento pero mucha luzLos pinos necesitan luz
Una de las cosas que forma parte del cuidado de la mandíbula es asegurarse de que haya suficiente luz. Desde el principio debes elegir un lugar soleado. Evite que su pino crezca demasiado cerca de edificios o paredes u otros árboles altos que le roban la luz. Si mantiene su pino en la maceta, es mejor colocarlo en el alféizar de la ventana para que las ramas inferiores se iluminen.
El sustrato
En cuanto a las condiciones del suelo, los pinos son muy frugales. Sin embargo, algunas medidas optimizan el desarrollo.
fertilizar
Debes fertilizar un pino bonsai con un fertilizante líquido cada 14 días. Detenga la aplicación de fertilizante por completo durante el invierno.
Giessen
Aunque el pino puede soportar una sequía prolongada, es recomendable mantener el suelo húmedo durante todo el año. Sin embargo, debe evitar el encharcamiento.
Mantenga el pino como un bonsái
El acortamiento regular de los brotes es necesario para mantener la forma de bonsai de su pino. Así es como lo haces:
- Realice cortes en la espalda en invierno cuando la menor cantidad de resina se escape del corte.
- En julio y agosto, reduzca todos los brotes demasiado largos a 1 cm, retire las agujas viejas
- Arranca los cogollos de septiembre a noviembre.
- repita el proceso en marzo o abril
- en mayo quita las velas nuevas y los brotes jóvenes
- quitar las agujas viejas del año anterior en octubre
Reconocer enfermedades
Los siguientes errores de atención suelen ser responsables de los trastornos del crecimiento:
- riego incorrecto (anegamiento)
- Repot
Si las agujas de tres años se vuelven amarillas, no hay nada de qué preocuparse. Este es un proceso natural, es diferente cuando las agujas nuevas se decoloran. Aquí podría estar presente una enfermedad fúngica.